noviembre 17, 2005

Señores Candidatos a la Presidencia de Chile

Señores Candidatos:

Creo, siendo una persona que se siente distante e independiente de la política chilena, como muchos otros, que existe una gran deuda con la gente sobre los reales alcances de sus programas de gobierno. Estamos a menos de un mes de las elecciones, y no creo que muchas personas conozcan a fondo sus perspectivas, visiones, compromisos y discursos sobre las distintas y diversas demandas y necesidades de la población nacional. Creo también que se ha abusado del uso del discurso populista y genérico que busca complacer a muchos y que deja de lado la explicación de las soluciones propuestas a las necesidades específicas reales de cada grupo social. Es cierto que hay temas que nos tocan a todos, como la salud, la educación, el trabajo, la libertad de creencias y de expresión, y aprecio la preocupación por ellos. Sin embargo, cuando la mayoría de los discursos políticos hablan de lo mismo, se pierde la diferenciación y la gente comienza a sentir distante la solución a sus problemas inmediatos. Me encantaría que se cambiara aunque sea en estos días que quedan, los discursos por cosas más prácticas, como por ejemplo la divulgación de partes específicas de los programas de gobierno hacia la solución de las cuestiones que reclama cada sociedad. Todos hablan de hacer crecer al país con igualdad, y a mi juicio se olvidan de explicar prácticamente como lo harán. Hablan de distribución del ingreso y no se preocupan del todo por generar mayor riqueza al país para que esa distribución equitativa nos alcance para vivir dignamente. Nos dicen que seguirán empujando al país por el camino del desarrollo y no veo la atención debida a mi juicio sobre la creación de valor al país a través de más recursos para la investigación y desarrollo tecnológico, la educación profesional, el emprendimiento, el liderazgo y la ética profesional.

Como director de algunas pequeñas empresas comprendo la problemática para conseguir recursos para inversión, y también debo decir, no están de forma clara, las instancias para que empresas nuevas de enorme talento y con innovaciones realmente de calidad crezcan y hagan llegar sus productos y servicios a otras pequeñas empresas a fin de ir construyendo la base necesaria para formar una corriente real de progreso cooperativo y con un gran objetivo de país. Chile a construido una gran imagen de país hacia fuera, pero siento que es la hora de crear también valor hacia adentro, nivelando tecnológicamente a las empresas, distribuyendo el conocimiento, fortaleciendo la cooperación entre las empresas, el gobierno y la educación, y generando un crecimiento y progreso homogéneos que generen un patrimonio de conocimiento interno capaz de generar nuevos productos de exportación, nuevos focos de desarrollo, nuevas disciplinas de investigación y una base para que los grandes talentos jóvenes, los soñadores, los emprendedores y los visionarios, lleven a Chile a ser un líder latinoamericano y mundial.


Sea quien sea que salga electo, espero que refleje el producto de su trabajo y esfuerzo por componer un buen programa de gobierno y no sea el reflejo del abuso del marketing popular y la simpatía buscada intencionalmente en la gente. Lamentablemente somos una sociedad que sigue a lo que está de moda, lo top, lo bacán, y a veces olvidamos que debemos expresar abiertamente nuestra opinión y reclamar por nuestras necesidades en vez de valorar el sensacionalismo, la farándula y la popularidad repentina. En este aspecto, también hay una gran deuda por generar cultura y educación acordes a una sociedad que sueña con ser desarrollada y líder en la región. Entonces, suerte a todos ustedes, entendiendo que la suerte es una oportunidad bien ganada producto del esfuerzo y el trabajo constante por un futuro mejor.

No hay comentarios.: